Valencia toma conciencia de los problemas de movilidad de las personas con baja visión
Una de las principales misiones de la SEEBV es concienciar a la población sobre los problemas que se encuentran en su día a día las personas con baja visión. Y estos problemas son mucho mayores en entornos no controlados, como la calle, donde las personas con baja visión o ceguera legal se encuentran con multitud de obstáculos para realizar sus desplazamientos diarios. Es por eso que el colegio de ópticos-optometristas de la Comunidad Valenciana, la asociación Española de Aniridia y la Once, con participación de la SEEBV, instalaron un circuito de movilidad para que todo el que quisiera experimentara de primera mano como es la movilidad con baja visión.
El objetivo de la iniciativa no fue otro que el de concienciar a la población sobre las dificultades que entrañan las aceras y las calles para las personas con baja visión. Y es que como explicó David Cansinos, atleta paralímpico con cinco medallas en su palmarés, la movilidad puede resultar un problema grave para la gente con baja visión o ceguera legal: «Lo más complicado de mi preparación como deportista es el camino que tengo que hacer cada día desde mi casa hasta el lugar de entrenamiento», expuso.
Los participantes en este iniciativa vistieron gafas que simulan distintas patologías asociadas a la baja visión así como un antifaz que les impedía ver por completo. Ayudándose de un bastón debían sortear todo tipo de obstáculos reales que las personas con baja visión se encuentran a diario. Patinetes, sillas, bicicletas o contenedores se dejan cada día en las aceras (muchas veces mal) y dificultan mucho la movilidad de las personas con baja visión. La desconsideración o el descuido de la gente, que rara vez piensa en las personas ciegas, agrava esta situación. Por eso son tan importantes estas campañas.